Ogro
©Letra y música: José-Manuel Montesinos
13 de abril de 2010
Érase una vez… que ojalá no fuera,
hubo un ogro feo, hipócrita y gordo,
que agitaba, cruel, fuego en su caldera
para asar adentro a algún niño sordo.
Disfrazaba el ansia fofa de su sexo
tras sotana negra, manchada de baba.
Como un santurrón, orante y genuflexo,
puesto ante el altar, sus cuernos limaba.
Mientras del retablo, pintado de azul,
un Niño Jesús de Praga
lloraba y lloraba…
Hasta hacerse llaga…
lloraba y lloraba…
En la noche aciaga….
lloraba y lloraba…
y lloraba…
Dentro del armario guardaba las prendas
de los monaguillos que se iba tragando,
y echaba al sagrario todas las ofrendas
de aquel sacrilegio de vientre colgando.
Érase una vez… en el bosque, un lobo…
y la vieja bruja de Hansel y Gretel…
y era en Hamelín que un flautista bobo
se llevó tras sí a los mozalbetes…
Pero en los cuentos tristes se lleva la palma
Ogro sinvergüenza, este caradura,
que hablándonos de Dios al Diablo dio su alma,
Ogro pederasta, vestido de cura.
Ya basta.
Ya basta.
Ogro pederasta
Ya basta.
Ay ay ay ay
Jesús nos dice
ay ay ay aquel
que escandalice…
aquel que quisiera
de un niño abusar,
más le valiera
su mano cortar,
más le valiera,
en vez de pecar,
colgarse de cuello
una piedra molar
y echarse con ella
hasta el fondo del mar,
hasta el fondo del mar,
hasta el fondo del mar,
más le valiera
en vez de pecar,
más le valiera,
su mano cortar…
No hay comentarios:
Publicar un comentario